Quizás, como dicen, con el paso del tiempo y las experiencias, los años te van cambiando. Te van enseñando a entender muchas cosas.
Con el tiempo, ya no discutes al pedo, buscas no enojarte o hacerlo menos, evitas quilombos y mambos ajenos, conversaciones improductivas y te acostumbras a ahorrar consejos no pedidos.
Al final, con los años, si alguien te quiere, se queda contigo. Si alguien te ignora, simplemente lo dejas ganar, te alejas y sigues tu rumbo. Si algo te gusta, vas por ello; si algo te molesta, lo planteas; si no está en tus manos, le quitas atención y pasas a otra cosa.
Con el paso del tiempo, seguro queda menos gente alrededor; pero los que quedan son los que de verdad suman, los agradecidos, son los que importan; y se les quiere todavía un poco más.
Los años sin duda enseñan. Quizás, por momentos sientes que te rompen o te rompes; pero siempre hay tiempo y oportunidades para arreglarte, para renacer. Con los años, te das cuenta de que no siempre se gana, pero si lo haces bien, siempre se aprende.
A veces toca amar, otras tantas soltar. Todo te lo enseña el tiempo, para bien o para mal, pero siempre se agradece.
#ApuntesalMargen
#ReflexionesenOjotas
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